Tarde lluviosa, el cielo es una metáfora de la inmensidad potente y calmada: gris brillante…
Aire frio, niebla que sale de la respiración; es el bosque… no importa si me dicen que es un parque urbano, que no es tan natural como creo, no importa la basura y que nadie la recoja –con todo , hay mucho menos que en las otras partes-.
No importa el juicio de quienes no entienden lo que vivo porque no lo han vivido… La vida es la juez de los juicios y sé que este es el bosque, en su esplendor, su misterio y su callada belleza.
…ese es el bosque, este su voz.
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