Quiero la excelencia, me gusta lo nuevo, por eso no reutilizo las botellas de plástico ni de vidrio, me preocupa la ecología y para que los demás lo noten, compro productos “organicos” en envolturas de papel. El cesto de basura es mi confidente mudo, en él puedo ser libre, sin que me juzgue nadie, en él puedo demostarme que poco me interesa la vida, cuan poco me interesa si contamino, cuanto me gusta comprar cosas inútiles, cuanto me gusta ser como soy: ciego, tonto, ignorante… Lo mejor de todo (es un secreto, chitón) es que muy en el fondo, me siento de alguna forma superior a quienes me rodean… La vida no es tan complicada, solo quiero pasármela bomba, embriagarme cada sábado hasta sudar etanol con esa monótona danza que todos los extraños solitarios bailamos juntos para sentirnos tribu, masa, equipo…
No soy mala persona: gasto mi dinero en objetos inútiles que solo sirven de adorno (y solo mientras la moda les preste vigencia),
Voy al cine dos veces al més, hollywood me provee de sueños y arquetipos fast food, tras la oscuridad de la sala, tras el silencio de más extraños que asistimos a la sala, puedo ser héroe, mártir, sabio, guerrero, salvar al mundo, vivir otras épocas y rezar en el silencio de mis emociones que el bien siempre triunfa… en las películas.
No soy mala persona, solo compro adornos para navidad, luces que elevaran mi tarifa a las nubes (metáfora costosa: las deudas también van al cielo) consumo de electricidad, intercambios forzados donde solo nos regalamos baratijas inservibles, pero ¡hay que gastar! El animo navideño nos dicta demostrar nuestros deseos de amor y de paz comprando, ¡bello mundo, que asi nos vendes lo que no es nuestro… ¿Es nuestro?
No soy malo, solo quiero pasármela bomba, a nadie hago daño
Yo no tengo la culpa de que el auto contamine, de que las hamburguesas sepan tan bien, de que comprar sea un desahogo, de que el conocimiento sea tan difícil y pensar tan doloroso, solo quiero verme bien, ligar mucho, coger mucho, beber mucho, vivir de fiesta y ser querido, ser citado, ser referente…
No soy mala persona, aunque el dedo acusador me señale mietras grita: CONSUMISTA… es solo que si a mis lideres, si a mis padres postizos y elegibles, si a mis amos no les importa, si a mis amigos no les importa, si a mis proveedores de vida no les importa, pues a mi menos.
No soy mala persona… solo soy un animal, esclavo de mis instintos (que conveniente es ser un esclavo irresponsable, la responsabilidad asusta)
viernes, 22 de agosto de 2008
No soy mala persona, no me culpen
Etiquetas:
Consumismo,
Contaminación,
Ignorancia,
Irresponsabilidad,
Mercado,
Responsabilidad,
Sociedad
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Dónde estás? Por qué no escribes?
Publicar un comentario